Samsung continúa apostando fuerte por el liderazgo en el universo Android con el lanzamiento de su nueva línea Galaxy S22. De los tres modelos presentados, el Galaxy S22+ se posiciona como una de las propuestas más equilibradas y potentes. Hemos tenido la oportunidad de probarlo a fondo, y sus capacidades lo colocan como uno de los mejores dispositivos del momento.
Un diseño refinado con materiales premium
El Galaxy S22+ llega con un diseño que, si bien no supone un cambio radical respecto a su antecesor, sí introduce mejoras sutiles pero relevantes. La estructura está fabricada en aluminio reforzado, mientras que tanto el frontal como la parte trasera están protegidos con cristal Corning Gorilla Glass Victus+, lo que le aporta una sensación de solidez y elegancia en mano.
Visualmente, mantiene la identidad de la gama S21: módulo de cámaras trasero independiente, alineación vertical de los sensores y una pantalla con bordes rectos y marcos simétricos que ayudan a crear una apariencia limpia y moderna. Aunque su tamaño y peso (196 gramos) podrían sugerir un dispositivo aparatoso, el S22+ se siente cómodo y bien equilibrado, incluso para quienes no están acostumbrados a teléfonos grandes.
Potencia gráfica con sello de AMD
Uno de los puntos más destacados de este modelo es su procesador Exynos 2200, acompañado por la GPU AMD Xclipse 920, una novedad dentro del ecosistema Galaxy. Esta colaboración permite un rendimiento gráfico sobresaliente, especialmente en juegos exigentes o tareas multitarea. Se complementa con 8 GB de RAM y opciones de almacenamiento de 128 o 256 GB, aunque no incluye ranura para tarjeta microSD.
La pantalla AMOLED de 6.6 pulgadas ofrece resolución Full HD+ y tasa de refresco adaptativa de hasta 120 Hz, con una frecuencia táctil de 240 Hz. Esto se traduce en una experiencia visual fluida, brillante y muy responsiva, ideal para todo tipo de contenido multimedia.
Cámaras versátiles para todo tipo de capturas
En el apartado fotográfico, el Galaxy S22+ no se queda atrás. Integra un sistema de triple cámara trasera compuesto por un sensor principal de 50 megapíxeles con apertura f/1.8, un ultra gran angular de 12 MP f/2.2 y un teleobjetivo con zoom óptico 3x de 12 MP f/2.4. La cámara frontal, por su parte, es de 10 MP y ofrece resultados más que correctos para selfies y videollamadas.
Los resultados fotográficos son muy satisfactorios, con buena reproducción de color, rango dinámico amplio y buen desempeño en condiciones de poca luz. La app de cámara, además, incluye múltiples modos de captura, tanto automáticos como profesionales, lo que amplía las posibilidades creativas del usuario.
Batería y conectividad al nivel esperado
El dispositivo cuenta con una batería de 4,500 mAh, que proporciona autonomía suficiente para una jornada completa de uso intenso. La carga rápida de 45 W permite recuperar gran parte de la batería en poco tiempo, y también se incluye carga inalámbrica de 15 W, así como carga inversa para otros dispositivos.
En conectividad, el Galaxy S22+ está a la vanguardia: compatibilidad con redes 5G, Wi-Fi 6E, Bluetooth 5.2, NFC y UWB. Todo esto se acompaña del sistema operativo Android 12 con la capa One UI 4.1, que garantiza una experiencia fluida, intuitiva y personalizada. Samsung también promete actualizaciones de sistema durante cuatro años, lo cual representa una de las mayores garantías dentro del ecosistema Android.
Extras que marcan la diferencia
Entre las características adicionales destacan el lector de huellas ultrasónico bajo la pantalla, altavoces estéreo con sonido envolvente, resistencia al agua y polvo con certificación IP68 y compatibilidad con Samsung DeX, que permite transformar el teléfono en una estación de trabajo conectándolo a un monitor.